Coincidiendo con nuestro ideario católico, hemos preparado, al final del mes de mayo, una fiesta a nuestra Madre la Virgen María, modelo de fe y estilo de vida a imitar, porque estamos convencidos de que la nueva evangelización para la transmisión de la fe empieza precisamente con los más pequeños.
Para ello, hemos preparado unos bonitos altares en las clases ya que por la pandemia de la Covid-19 no hemos podido hacer la ofrenda a la Virgen todos juntos en el patio de la Escuela. Los niños han traído flores que le han entregado a la Madre del Cielo y le han cantado con sus educadoras bonitas canciones. Además, los más mayores le han dedicado una poesía o una retahíla especial que han aprendido con sus profesoras.
Con esta bonita y alegre fiesta le pedimos a la Virgen María su protección maternal tanto para todos los niños de la Escuela y sus familias como para el personal del Centro y que sea para todos nosotros un modelo fe, de amor y de entrega a Dios. |